Cómo hacer magdalenas deliciosas y esponjosas para toda la familia

5 de Agosto de 2019

¿Quieres hacer un postre que sea esponjoso y dulce, pero a la vez fresco y delicioso? ¡Necesitas la receta de las magdalenas! Y es que estos bizcochitos con aroma a naranja llevan siglos siendo un bocado reconfortante, al menos para gran parte de la familia europea.

Por eso en Brycus consejos te traemos un especial sobre este tierno -pero poderoso- postrecito, además de la receta definitiva para prepararlo.

Antes de visitar la seccion reposteria y llevarte todos los productos proveedor ARC que necesitas para hornear, queremos contarte un poquito sobre ellas. Quizás pienses que las magdalenas son tan famosas que no necesitan presentación. A fin de cuentas, han sido las estrellas en los cumpleaños infantiles por años. Sin embargo, todo platillo tiene su historia y este no es la excepción.

¿Magdalenas, cupcakes y muffins son lo mismo?

¡En lo absoluto! Las magdalenas son bizcochos pequeños sumamente esponjosos. Los muffins, en cambio, son pastelitos chatos y tienen presentaciones saladas. De hecho, el muffin de huevo con jamón es la estrella de los desayunos en Inglaterra. Los cupcakes americanos se parecen un poco a las madalenas, pero la receta es diferente. Además, vienen con rellenos y decoraciones, ganache de chocolate, fondant y mermeladas.

Ahora que ya conoces un poco sobre las magdalenas, es hora de revisar la receta y la seccion reposteria para asegurarte de que tienes todo lo que necesitas para esta aventura culinaria.

Las madalenas, magdalenas o madeleines son originarias de Francia, pero su popularidad las hizo adueñarse del corazón español. Su primera aparición fue en el siglo XVIII en el Ducado de Lorena donde cautivó a miles hasta llegar a París. Al principio, tenían forma de concha marina, pero hoy en día se hornean con moldes de silicona y papel rizado, tal como los muffins y cupcakes.

Cómo hacer magdalenas deliciosas y esponjosas para toda la familia

Todo lo que necesitas: utensilios de repostería

Magdalenas de naranja fáciles, suaves y esponjosas: la receta definitiva

En esta receta te daremos la lista de ingredientes, el paso a paso y nuestros Brycus consejos -o mejor dicho, nuestros Brycus secretos- para preparar unas magdalenas de infarto.

Ingredientes. (Para 6 magdalenas)

• 1 huevo

• 60 gramos de leche líquida

• 65 gramos de azúcar blanco

• 85 gramos de harina todo uso

• 4 gramos de polvo de hornear

• 40 gramos de aceite de oliva suave o vegetal

• Ralladura de media naranja. Puedes sustituirla por la de un limón

Indicaciones:

Busca en nuestra seccion reposteria los productos proveedor ARC que necesitas para hornear y compra los ingredientes. Coge un bol y pon el huevo. Bátelo con ayuda de la batidora eléctrica a velocidad alta y agrégale el azúcar poco a poco. La idea es hacer que el huevo levante para darle al postre ese toque esponjoso irresistible. Sabrás que está lista cuando tengas una crema espesa de color blanco que no llega al punto de nieve.

Reduce la velocidad. Suma el aceite, la leche y la ralladura de naranja, y bate hasta que todo quede homogéneo. En otro bol, vierte la harina y el polvo de hornear. Incorpora la mitad de los ingredientes secos a la mezcla tamizándolos con un colador.

Usa una espátula para unirlo todo con movimientos envolventes. Recuerda, ¡no tienes que batir mucho! Añade el resto de la harina y bate hasta que no queden grumos. ¿Nuestros Brycus consejos? Échale un chorrito de vainilla, recubre la mezcla con papel film y refrigerar hasta el día siguiente o -al menos- por un par de horas.

Cuando esté lista para hornear, precalienta el horno a 200° C y busca tu bandeja de magdalenas. Pon un papel rizado dentro de cada molde. Remueve un poco la mezcla con un batidor, toma una cuchara de helados y vierte el preparado en el papel rizado. No hace falta que lo rellenes hasta el tope.

Para darle una nota azucarada, pon una cucharadita de azúcar encima de cada molde con mezcla y mételos en el horno. Espera 15 minutos o hasta que los bordes estén doraditos y las magdalenas hayan pasado la prueba del palillo.

Déjalas enfriar, sírvete un vaso de leche y ¡disfruta!

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