Los productos que usamos de forma cotidiana están hechos de distintos materiales. Una rotura debido al uso o a un accidente no tiene por qué significar necesariamente el fin de su vida útil. Pegar las piezas con el pegamento adecuado puede salvar el día. Brycus consejos te ayuda a determinar cuál es el mejor adhesivo para ti.
¿Qué tipos de pegamentos existen?
Hay que tomar en consideración el material con el que vas a trabajar antes de elegir un pegamento u otro. De lo contrario, podrías estropear definitivamente la superficie y no lograr unir las piezas rotas. Algunos adhesivos están especialmente diseñados para pegar superficies de madera, cristal y metal, entre otras. En este caso, solo tienes que elegir el producto adecuado.
No obstante, a menos que tu trabajo implique unir con frecuencia piezas de un mismo material, la mayoría de los usuarios prefieren tener un pegamento multipropósito, que puedan usar en diferentes circunstancias. Dentro de esta categoría, encontramos distintas variedades
Como su nombre lo indica, estos adhesivos están diseñados para pegar toda clase de materiales, aunque son especialmente efectivos en superficies de papel, madera o cerámica.
Los pegamentos universales se fabrican de polímeros sintéticos y son económicos y fáciles de usar. Como desventaja, no crean uniones muy resistentes ni soportan bien el calor y la humedad.
También conocidos como supercementos, esta clase de pegamentos logra unir toda clase de materiales gracias a una reacción química que se produce al contacto con la humedad del ambiente. Los cianoacrilatos secan casi al instante y crean uniones muy fuertes y visibles.
Pegamentos de componentes separados
Algunos productos están hechos de dos materiales que, al combinarse entre sí, producen una reacción que les permite lograr uniones muy sólidas. Vienen en envases separados y se deben mezclar a partes iguales para conseguir los resultados esperados.
Por ejemplo, tenemos los polímeros compuestos por una resina epoxi y un agente endurecedor. Son ideales para pegar materiales rígidos y rellenar huecos. Su único inconveniente es que las uniones no pasan inadvertidas y su proceso de secado es muy lento.
También denominados adhesivos en disolución, son una emulsión que suele estar hecha a base de neopreno, de policloropreno, de nitrilo o de caucho estireno-butadieno, y se pueden aplicar con brocha, espátula, rodillo o incluso mediante una pistola de pulverización.
Al ser elástico y deformable es ideal para unir materiales flexibles, como suelas de zapatos. También está recomendado en la fijación de recubrimientos para suelos. Asimismo, es efectivo en madera, aunque conviene aplicar una primera capa para sellar todas las porosidades y, una vez que la superficie haya secado, aplicar una capa definitiva para pegar las piezas entre sí.
Independientemente del tipo de pegamento que utilices, las siguientes sugerencias de Brycus consejos te permitirán lograr los mejores resultados posibles.
• Lee atentamente las instrucciones de uso antes de aplicar el pegamento.
• Verifica que la superficie de contacto esté libre de agua, grasa y polvo que puedan impedir un contacto adecuado entre las superficies.
• Mantén unidas las piezas mientras seca el pegamento con la ayuda de una mordaza.
• Trabaja en un espacio ventilado y con cubrebocas para no exponerte a los vapores tóxicos de los pegamentos.
• Evita fumar cuando manipules pegamentos inflamables.
• Usa un palillo de madera o de plástico en lugar de manipular directamente el pegamento con las manos.
• Utiliza acetona o aceite de oliva para despegar tus dedos si fuera necesario.
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